Nicolás Pereyra: “Hace un año, todavía enfrentaba desafíos para aceptar mi identidad como persona autista”
El Testimonio de Nicolás Pereyra: La Lucha Diaria de un Joven con Trastorno del Espectro Autista
1 de enero de 2025Definición del Trastorno del Espectro Autista en Uruguay
El Ministerio de Salud Pública (MSP) clasifica el Trastorno del Espectro Autista (TEA) como una condición del neurodesarrollo que influye en la percepción y la interacción de una persona con su entorno.Aunque las experiencias y características del autismo son diversas, los desafíos suelen manifestarse en áreas como la comunicación social, el procesamiento sensorial y los intereses o comportamientos.
Cada individuo con TEA presenta un perfil único que puede evolucionar a lo largo de su vida.
No se ha identificado una causa única para el autismo, pero investigaciones sugieren que factores genéticos y ambientales pueden influir en su desarrollo.
Es crucial la identificación temprana y el acceso a apoyos adecuados para mejorar el bienestar y la calidad de vida de quienes forman parte del espectro.
Compromiso del Estado Uruguayo
En Uruguay, el TEA es considerado un problema de salud pública.Anualmente, el Estado reafirma su compromiso para abordar esta situación, con una estimación de entre 30.000 y 35.000 personas afectadas por este diagnóstico en el país.
En respuesta, se han promulgado leyes y políticas destinadas a brindar apoyo a quienes padecen autismo.
Atención y Realidad de las Familias
El Banco de Previsión Social (BPS) ofrece atención especializada a los usuarios con trastornos del espectro autista, incluyendo servicios médicos mediante equipos multidisciplinarios y pensiones cuando corresponde.Sin embargo, muchas familias enfrentan realidades que contrastan con estas políticas.
El Testimonio de Nicolás Pereyra
Desde Diario La R visitamos a Nicolás Pereyra, un joven montevideano de 25 años diagnosticado con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), síndrome de Asperger y síndrome de Tourette.Nicolás vive con su familia en el Barrio Colón y actualmente cursa el bachillerato en la UTU, aunque ha tenido que interrumpir sus estudios en ocasiones.
En su rutina diaria, Nicolás disfruta de salir con su hermana y hacer ejercicios, así como jugar videojuegos.
Si bien no recuerda mucho de su infancia, menciona episodios difíciles relacionados con su sensibilidad a ruidos y sonidos.
Desafíos y Tratamientos
Su madre, María Fernanda Peralta, recuerda que durante el embarazo contrajo toxoplasmosis, aunque desconoce si esto influyó en el diagnóstico de su hijo.Desde pequeña, Nicolás mostró comportamientos desafiantes y a los 5 años comenzó la escuela sin pasar por el jardín.
A lo largo de su desarrollo escolar, experimentó dificultades de adaptación y graves problemas de conducta.
María critica la falta de atención en salud mental, señalando que muchos profesionales simplemente recetan medicación sin ofrecer soluciones efectivas.
A pesar de haber explorado diversas opciones, la familia decidió no optar por la internación de Nicolás.
Un Cambio Decisivo
Este año, la familia tomó la decisión de trasladar a Nicolás a un centro privado de salud mental, donde han notado mejoras significativas en poco tiempo.Nicolás ha comenzado a aceptar su diagnóstico y a aprender sobre el TEA, logrando un progreso notable en su salud emocional y social.
A través de su proceso de aceptación, destaca: “Hace un año no aceptaba ser una persona autista.
Ahora me he dado cuenta de que el autismo es diferente en cada persona”.
Su cambio de perspectiva le ha permitido manejar mejor sus emociones y sentirse más seguro en su entorno.
Reflexiones Finales
A pesar de las dificultades del pasado, Nicolás y su familia enfatizan la importancia del apoyo familiar y la búsqueda de profesionales comprometidos.“La familia es fundamental en la vida de una persona con autismo”, concluyen.
Esta historia fue publicada originalmente en Diario La R.
Fuente: Grupo R Multimedio